Símbolo Del Desierto En La Biblia.

20 de septiembre de 2020

Símbolo del desierto en la Biblia.

un lugar sin habitantes

la desolación

Símbolo Del Jardín De Dios Y Del Edén.

Isaías 6:12 Hasta que Jehová haya echado lejos a los hombres, y la tierra se convierta en un gran desierto,

Isaías 24:1 He aquí, Jehová asolará la tierra y la asolará; trastornará su faz y esparcirá a sus habitantes.

Isaías 24:10 La ciudad desierta está en ruinas; Todas las casas están cerradas, ya no entramos en ellas.

Isaías 27:10 Porque la ciudad fuerte está solitaria, es morada desierta y desierta como el desierto; Allí pasta el ternero, allí se echa y pasta en las ramas.

Salmos 107:4 Vagaron por el desierto, caminaron en soledad, sin encontrar ciudad donde habitar.

Isaías 33:8 Los caminos están desiertos; Ya no pasamos por las carreteras. Ha violado el pacto, desprecia las ciudades, no respeta a nadie.

Jeremías 25:37  Las viviendas pacíficas son destruidas por el ardor de la ira del SEÑOR.

Jeremías 25:38 Ha abandonado su morada, como el cachorro de león su guarida; Porque su tierra está reducida a desierto por el furor del destructor y por el ardor de su ira.

Los hombres han abandonado al Señor, han elegido la iniquidad. Dejaron el monte del Señor para seguir al hombre y su ciudad. Caminaron en oscuridad, no vieron nada de lo que vendría, la ira de Dios. Porque rechazaron su ley y su conocimiento por los del hombre.

Sin conocimiento es el desierto.

Oseas 4:6 Mi pueblo está destruido por falta de conocimiento. Puesto que habéis rechazado el conocimiento, yo os rechazaré y seréis privados de mi sacerdocio; Puesto que tú te has olvidado de la ley de tu Dios, yo también me olvidaré de tus hijos.

Jeremías 6:8 Recibe instrucción, oh Jerusalén, para que no me aparte de ti y te convierta en desierto y en tierra deshabitada.

El libro de la vida del Cordero p.86

(27) Sin conocimiento es atravesar el desierto; y Moisés os llevó por este desierto al Hijo del Hombre que os tomará en su mano para conduciros al otro lado donde reinaréis. Entiendan que la Tierra prometida a los hijos de Abraham, Isaac y Jacob (al pueblo de Israel) no es un país ni una región, sino la Tierra entera que es entregada a los santos inocentes del último día, de quienes serán Nace una posteridad sana.

El libro de la vida del Cordero P.14

(2) Para juzgar, primero hay que experimentar por sí mismo lo que los hombres experimentan, porque nadie  puede juzgar lo que les es ajeno. Por eso debes saber cómo  fueron mis días y cómo Satanás intentó destruirme en el desierto. Satanás no es una  entidad, sino el mal que puede derribar a quienes no pueden resistirlo. Hablo de desierto, porque mientras no sepamos quiénes somos, hacia dónde vamos y cuál es el sentido de la existencia, estamos en el desierto y en el ayuno que hace sufrir al mundo. Así que prestadme  oído sobre cómo fue mi vida, que se desarrolló en cuatro períodos distintos  hasta que quedé encadenado, de modo que no podía moverme sin haber transmitido  el Mensaje.

La travesía del desierto el período de la ignorancia

Efesios 4:17 ¶ Por tanto, esto es lo que digo y declaro en el Señor: que ya no andéis como los gentiles, que andan en la vanidad de sus pensamientos.

Efesios 4:18 Su mente está entenebrecida, están alejados de la vida de Dios, a causa de la ignorancia que hay en ellos, a causa de la dureza de su corazón.

El Libro de la Vida del Cordero p. 88

(7) Pero en verdad, sea judío, pagano u otro, poco me importa,  porque todos estos términos terminan en mi presencia. Lo que importa en la noche del mundo  es sólo que comprendamos la verdad; porque les traerá de vuelta cada una de  sus creencias que nada tienen que ver con la profecía y su cumplimiento que se  hace conmigo. Se puede ser pagano por ignorancia y no seguir siéndolo, mal circuncidado y  perfeccionado en conocimiento; lo principal es educarse y regresar a Dios  con un corazón puro para entrar en su reino y vida eterna.

El libro de la vida del Cordero p.75

(19) Como fue para mí, Moisés resucitó después de cuarenta años de vagar por  el desierto, porque sin el conocimiento de la verdad se vaga por el desierto. Al igual que yo, él  no era un anciano cuando resucitó ni tenía una larga barba. Similares  y nacidos del mismo huevo, uno al lado del otro tendríamos la apariencia de dos gemelos. Él fue  resucitado para iluminar la noche, para que pudieras cruzar el desierto. 

Y Dios me ha hecho a quien los profetas llaman luz de las naciones; porque al  daros el pan del cielo y abriros las puertas del reino, hago que  amanezca en la Tierra.

(20) Sin conocimiento no se tiene vida, aunque se respire, porque es vivo  lo que desciende al reino de los muertos. Y cuando recibimos de lo alto el pan del  cielo (maná) que sacia a quienes lo comen, abrimos los ojos. Entonces esta vez estamos  iluminados y vivos, porque es vivo que volvemos del infierno.

Pero abrir los ojos en un mundo de oscuridad que está llegando a su fin es morir  por este mundo, en el sentido de que uno se convierte en un extraño para él. Esto es lo que me pasó a mí. Por eso  dijo Dios al hombre: El día que se abran tus ojos, morirás. Todo esto  está escrito por Moisés y mostrado por la vida de Jesús, para que se sepa desde el amanecer hasta  el atardecer que yo soy verdaderamente el Hijo del hombre que había de venir a salvar al  mundo. Porque estoy crucificado por lo que sé y por lo que veo. Y es gracias a este  dolor que puedo escribir, y que me alejaría si no lo hiciera.

(21) Si durante todos estos siglos pasados ​​en el desierto, sólo hubierais  logrado comprender que el Hijo del Hombre está anunciado para los días del fin, entonces  habríais sabido que él es al mismo tiempo el fin y el principio: el fin. De este mundo y el  comienzo del nuevo mundo. Entonces estarías listo hoy para escucharlo  y escucharlo. Pero todavía estáis en el desierto, hijos míos, y en gran  oscuridad, porque habéis puesto reyes sobre vuestras cabezas para que Dios no reine sobre vosotros.

Y las consecuencias de tal actitud, debido a la juventud del mundo, son que este fin  ya está detrás de la puerta, listo para llamar. Sin embargo, en el desierto  que atravesasteis entre Moisés y yo, Dios dijo:

No sigáis los preceptos de vuestros padres, no guardéis sus costumbres y

¡No os contaminen con sus ídolos! Yo soy el SEÑOR vuestro Dios. Seguir

mis preceptos, guardad mis juicios y cumplidlos.

2 Reyes 21:8 Ya no haré que los pies de Israel se desvíen de la tierra que di a sus padres, con tal que tengan cuidado de hacer todo lo que les he mandado y toda la ley que les he mandado... Mi siervo Moisés les ordenó.

hacia el abismo

Salmos 106:9 Amenazó al Mar Rojo, y se secó; Y los hizo caminar por las profundidades como en un desierto.

Salmos 107:33 Él convierte los ríos en desierto, y los manantiales de agua en tierra seca,

Salmos 107:34 La tierra fértil se vuelve tierra salada, a causa de la maldad de sus habitantes.

Isaías 50:2 Vine: ¿por qué no había nadie? Llamé: ¿por qué nadie respondió? ¿Mi mano es demasiado corta para canjear? ¿No tengo fuerzas suficientes para cumplir? Con mi amenaza seco el mar, reduzco los ríos al desierto; Sus peces se echan a perder por falta de agua, y perecen de sed.

El Libro de la Vida del Cordero p.396

(21) Por tanto, el fin es hoy inevitable. Sin embargo, para que no haya  confusión en vuestras mentes, pensad que, sin el apocalipsis, sería el fin de toda  existencia, aunque sólo fuera por la proliferación de humanos que transforman la  Tierra verde en un desierto. Lo cual ya ha comenzado en gran medida. Porque esta proliferación escandalosa  es también consecuencia del empobrecimiento de los pueblos desestabilizados  por aquellos a quienes Dios abomina. Pero el fin también llegaría a través del  envenenamiento cada vez mayor de los alimentos; por la modificación de organismos vivos; por  la deforestación y la desaparición de especies silvestres; por la creciente suciedad y  contaminación; por la falta de agua potable; y por el  desarrollo desenfrenado de las ciudades que generan promiscuidad, miseria, violencia, falta de respeto y  el sinfín de enfermedades virulentas e incurables que conocemos. Pero, en verdad, el rápido cambio climático  debido por sí solo a las actividades humanas sería suficiente para acabar con el  mundo en poco tiempo. Y no habría supervivientes.

La huida al desierto

Este significado del símbolo del desierto es animado, es huida, es separación, es abandono. El pasaje que mejor transmite estas impresiones es éste:

Salmos 55:1 ¶ (55-1) Al cantor principal. Con instrumentos de cuerda. Canción de David. (55-2) ¡Oh Dios! ¡Escucha mi oración y no rehuyas mis súplicas!

Salmos 55:2 (55-3) Escúchame, y respóndeme; Deambulo de aquí para allá en mi pena y me inquieto,

Salmos 55:3 (55-4) A causa de la voz del enemigo y de la opresión de los impíos; Porque traen sobre mí calamidades y me persiguen con ira.

Salmos 55:4 (55-5) Mi corazón tiembla dentro de mí, y terrores de muerte me alcanzan;

Salmos 55:5 (55-6) Miedo y terror me asaltan, y escalofrío me rodea.

Salmos 55:6 (55-7) Yo digo: ¡Oh! Si tuviera alas de paloma, volaría y encontraría descanso;

Salmos 55:7 (55-8) He aquí, huiría lejos, habitaría en el desierto;

Salmos 55:8 (55-9) Escaparé con prisa, más rápido que el viento impetuoso, que la tempestad.

Salmos 55:9 ¶ (55-10) ¡Nada hagas, Señor, divide sus lenguas! Porque veo violencia y contienda en la ciudad;

Salmos 55:10 (55-11) Lo circundan día y noche sobre los muros; La iniquidad y la malicia hay en su seno;

Salmos 55:11 (55-12) La maldad está en medio de ella, y el fraude y el engaño no saldrán de su lugar.

Salmos 55:12 (55-13) No es enemigo el que me insulta, lo soportaré; No es mi adversario el que se levanta contra mí, de él me escondería.

Salmos 55:13 (55-14) ¡Tú eres mi igual, eres mi confidente y mi amigo!

Salmos 55:14 (55-15) Juntos vivimos en dulce intimidad, ¡Íbamos con la multitud a la casa de Dios!

Salmos 55:15 (55-16) ¡Que la muerte los alcance, que desciendan vivos al infierno! Porque la maldad está en su habitación, entre ellos.

Zacarías 14:5 Entonces huiréis al valle de mis montes, porque el valle de los montes se extenderá hasta Atzel; Huirás como huiste del terremoto en los días de Uzías rey de Judá. Y vendrá Jehová mi Dios, y todos sus santos con él.

El libro de la vida del Cordero p.401

Retiro

(1) Aunque lo que está sucediendo es enteramente tema de profecía, y lo demuestra hoy el Hijo del Hombre, muchas naciones todavía pensarán que pueden refugiarse detrás de su religión para escapar del desastre. Esto será así, porque cada secta religiosa que ha dejado su huella en el pueblo está convencida de tener un Dios propio, un profeta propio y una salvación propia. Sin embargo, para evitar morir, asegúrese de mantenerse alejado de él. Porque introducir la verdad en una montaña de mentiras es como introducir fuego en un montón de paja.
Por eso seréis testigos de la conflagración del mundo como nunca ha sido, incluso el día de la llegada de la Luna...
(2) Las Escrituras no hablan de que este evento pueda ocurrir eventualmente, pero eso sucederá. Suceder. Ahora bien, como todas las naciones arrogantes y sanguinarias están preocupadas por este fin del mundo que ellas mismas han provocado, no podemos saber de antemano cuál de ellas provocará el comienzo del apocalipsis. Sin embargo, estando atentos a todo lo que se preparará
o sucederá en los países a partir del nuevo siglo, sabréis cómo sucederá, nadie se equivocará. Pero ese día ya tendréis que estar resguardados en la montaña; porque si tuvieras que escapar a toda prisa durante el invierno, sería mucho más doloroso. Jesús también os advierte sobre esto.

Ir al desierto es escapar del mundo de la iniquidad, del mal, de la maldad: la Ciudad.

Proverbios 21:19 Mejor es habitar en tierra desierta que con mujer pendenciera e irritable.

El regreso del Señor en el desierto montañoso

Isaías 53:11 Con el trabajo de su alma saciará sus ojos; Con su conocimiento mi siervo justo justificará a muchos hombres, y se hará cargo de sus iniquidades.

Isaías 32:15 Hasta que el Espíritu sea derramado sobre nosotros desde arriba, y el desierto se convierta en huerto, y el huerto en bosque.

Isaías 32:16 Entonces la justicia habitará en el desierto, y la justicia habitará en el huerto.

Salmos 107:35 Él convierte el desierto en estanque, y la tierra seca en manantiales de agua,

Isaías 2:2 Y con el tiempo sucederá que el monte de la casa de Jehová será fundado sobre cabeza de montes, y será exaltado sobre los collados, y a él acudirán todas las naciones.

Isaías 11:9 Ningún mal ni daño se hará en todo mi santo monte; Porque la tierra será llena del conocimiento de Jehová, como las profundidades del mar de las aguas que lo cubren.

El desierto es un lugar sin habitante, una ciudad sin conocimiento se convertirá en una ruina sin habitante pero la montaña desierta se convertirá en una ciudad de conocimiento como Sión y la tierra se elevará hacia el cielo poblada por innumerables ángeles.

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